Las sustancias tóxicas están por todas partes: en el aire que respiramos, en los alimentos que comemos y en el agua que bebemos.
Incluso nuestros cuerpos y las bacterias que habitan nuestros intestinos producen sustancias tóxicas.
Existe habitualmente una toxemia endógena (se refiere al interior del cuerpo) y otra toxemia exógena (se refiere a la procedencia externa), juntas en algunos casos y en otros, por separado.
Además, se debe tener en cuenta la propia individualidad genética para la desintoxicación.
Cuando se produce una sobrecarga ciertos órganos no funcionan o lo hacen incorrectamente y deficientemente, se saturan, se bloquean. Produciéndose un gasto extra de energía, entre otras cosas.
Es importante identificar las toxinas del cuerpo y saber las formas naturales para apoyar la desintoxicación y eliminación de estos componentes dañinos.
Puede afirmarse que la salud de una persona está muy condicionada por su capacidad y los medios que emplea para desintoxicarse.
MAL ALIENTO = ACIDOSIS-INTOXICACIÓN
PASTOSIDAD DE LA BOCA = AFECTACIÓN – SATURACIÓN DEL INTESTINO.
TIPOS DE SUSTANCIAS TÓXICAS:
- a) METALES PESADOS, como: plomo, cadmio, mercurio, aluminio, etc. Tienden a acumularse en el cerebro, los riñones y el sistema inmune.
La mayoría de metales pesados acumulados en el cuerpo son el resultado de la contaminación ambiental producida por la industria y las pulverizaciones con pesticidas en el campo, o también, por sustancias contenidas en las vacunas o en los propios empastes dentarios.
Hay elementos nutricionales que contrarrestan el envenenamiento por metales pesados, como son el: calcio, el magnesio, el zinc, la vitamina C, el alga chlorella, el complejo de vitaminas del grupo B y, los alimentos con alto contenido en azufre, como son: ajos, cebollas y judías.
- b) FÁRMACOS, DISOLVENTES, PESTICIDAS, HERBICIDAS, ADITIVOS ALIMENTARIOS. Esta categoría de tóxicos afecta básicamente al hígado. Es sorprendente la tremenda carga que tiene que soportar el hígado para desintoxicar la increíble cantidad de tóxicos de estas características a los que de forma continua estamos expuestos.
Entre los componentes de ayuda a los mecanismos para desintoxicar el hígado, se encuentran plantas como: el diente de león, la cúrcuma, la alcachofera y el cardo mariano y otras sustancias azufradas.
- c) COMPUESTOS MICROBIANOS:
Las toxinas microbianas producidas por bacterias y hongos en el propio intestino pueden ser absorbidas, produciendo una importante perturbación de las funciones corporales.
Estas toxinas microbianas derivadas del intestino han sido relacionadas con una amplia variedad de enfermedades, tales como: enfermedades del hígado, gastritis, enfermedad de Crohn, psoriasis, lupus, problemas de tiroides, alergias y asma.
Para reducir la absorción de sustancias tóxicas se recomienda una dieta rica en fibra, principalmente de la llamada soluble, por lo tanto significa que se pueda digerir. Ésta se encuentra principalmente en todos los vegetales: cereales completos, frutas, hortalizas y verduras.
- d) PRODUCTOS DE DESECHO DEL METABOLISMO DE LAS PROTEÍNAS:
Los riñones son los órganos responsables de eliminar, en gran medida, los desechos tóxicos procedentes de la descomposición de las proteínas. Por lo tanto se debe ayudar a los riñones bebiendo adecuadas cantidades de agua de manantial y consumiendo menos proteínas.
También ayudan plantas como: la cola de caballo, la vara de oro, la gayuba, la grama y el enebro, entre otras.
PLAN DEPURATIVO, AYUDADO POR LA ALIMENTACIÓN:
- – Limitar los alimentos proteicos, junto con sus derivados y las grasas de procedencia animal.
- – Cambiar a cereales completos.
- – Tomar fruta fresca, de la temporada, fuera de comidas.
- – Cambiar el azúcar blanco por el integral y, limitar su consumo.
- – Eliminar: café, tabaco, alcohol y demás sustancias tóxicas y estimulantes.
- – Evitar los fritos.
- – Eliminar la leche y los quesos grasos o curados.
UNA DIETA MUESTRA QUEDARÍA DE LA SIGUIENTE FORMA:
- – Una vez al día, como mínimo, tomar una ensalada de germinados, sólo aliñada con aceite de oliva y sal. Nunca vinagre.
- – Tomar fruta fresca como mínimo una vez al día, fuera de las comidas principales (en el desayuno, a mitad mañana o en la merienda).
- – Cuando se coma proteína (carne, pescado, huevos, queso), acompañarla siempre y sólo con verduras y hortalizas.
- – Reducir el consumo de carne y pescado a máximo 3 á 4 veces por semana o incluso menos. En cualquier caso, sustituir la carne roja por la blanca ( de ave).
- – Cambiar los cereales blancos, por los completos o integrales.
- – Beber un mínimo de un litro y medio de agua diariamente, fuera de comidas y nunca del grifo.
- – Huevos: 2 ó 3 por semana.
- – Reducir el consumo de sal y de alimentos que la contengan.
- – Eliminar productos de bollería industrial.
- – Reducir y limitar las bebidas estimulantes: coca-cola, café, chocolate, etc.
- – Eliminar quesos grasos y curados. Consumir sólo queso fresco.
- – Cocinar al vapor, a la plancha, a la papillotte, o similar.
- – Realizar ejercicio físico diariamente, adaptado a sus posibilidades.
- – Consumir regularmente infusiones depurativas.
EN RESUMEN:
Un enfoque racional para ayudar a los mecanismos de desintoxicación del organismo, puede incluir las curas depurativas, realizadas primordialmente en los cambios estacionales, principalmente la primavera. Momentos cuando los propios ciclos naturales propician y potencian un mejor efecto eliminador.
La fase orgánica comprendida entre las 6 de la madrugada y las 2 del mediodía, es el mejor momento para la depuración. Ya que durante estas horas es cuando el organismo realiza, generalmente, mejor su desintoxicación.
Sin embargo, para apoyar verdaderamente a los procesos de desintoxicación del cuerpo, recomiendo un programa a largo plazo. Este programa implica la adopción de una dieta y un estilo de vida compatibles con la salud.